La altura del río en Rosario es un 50% menor que el promedio histórico

La falta de lluvias como consecuencia de la variabilidad climática en la naciente de la cuenca del Paraná durante el invierno y la primavera generó una bajante histórica del río, según afirmaron desde el Centro de Investigación de Recursos Naturales (CIRN) del Inta. La duración del fenómeno y los escasos niveles de agua ratifican la excepcionalidad de la bajante: si bien a esta altura del año el río en Rosario debería estar cerca de los 3,32 metros, las mediciones marcan en torno a los 1,60 metros, casi la mitad del promedio histórico.

“Desde hace un tiempo la variabilidad climática afecta cada vez más el normal desenvolvimiento de las diversas actividades, en especial las productivas. Producto de las escasas lluvias registradas durante el invierno y la primavera el río Paraná presenta una bajante récord que podría agudizarse en las próximas semanas” señaló Pablo Mercuri, el director de ese organismo estatal.

Ante este contexto, advirtió que según la información suministrada por el Instituto Nacional del Agua (INA) se puede estimar que la situación “podría agudizarse en las próximas semanas”. De todos modos, el especialista señaló que “hay probabilidades de ocurrencia de precipitaciones en las nacientes del río Paraná, en el interior del Brasil en los próximos días”.

También reconoció que “el escurrimiento de las lluvias sobre el curso del río en nuestro territorio demora varias semanas” y que “aún no se visualizan lluvias significativas en la cuenca del río Paraguay y del Iguazú que tiene un más rápido impacto en la altura y caudal del Paraná medio y bajo”.

Según el INA el río a la altura del puerto de Corrientes está a 1,70 metros, un 42% por debajo de la media para noviembre, mientras que en Goya se calcula una altura de 2 metros, un 49% menor al promedio. En tanto que en Paraná, Entre Ríos, la altura del río es de 1,25 metros, un 38 % menor a la media.