Primero hubo un viaje. Luego fotos y entrevistas. Más tarde se sumaron ilustraciones, textos e imágenes. Ese fue, en una síntesis muy estrecha, el derrotero que siguió el proyecto “Los huérfanos del Poopó. Cuentos de un lago desaparecido”, un delicado libro hecho con amor de artesano por el fotógrafo francés Émilien Buffard junto con la ilustradora Angie Strappa, quien (además de participar en la hechura del libro) forma parte junto a Ligia Rossi y Silvina Maroni del trío de mujeres a cargo de la editorial Listo Calisto.
El libro, que será presentado este jueves 7 a partir de las 19 en la Alianza Francesa, cuenta la historia con final infeliz del Poopó -el segundo lago más grande de Bolivia-, que en el año 2015 se secó por completo dejando a comunidades enteras a la deriva y borrando siglos de historia e identidad en ese rincón de Sudamérica.
Buffard, que además de fotógrafo es técnico en gestión de agua, estuvo en el lugar en abril de 2017 y entrevistó a pobladores del lugar y expertos sobre las razones que hicieron desaparecer al lago y las consecuencias socioambientales de un cambio tan drástico en el paisaje natural del lugar. “Primero fue pensado como un libro de imágenes, luego se sumó la idea de agregarle una bitácora de viaje y un relato ficcionado en la voz de un antiguo pescador. Finalmente también le sumamos un texto técnico”, explicó.
Varias fotos están “intervenidas” por el trazo de Angie Strappa, lo que convierte al relato en una obra más artística en la superposición de la imagen y la ilustración.
¿Cómo pudo desaparecer por completo un lago de alrededor de 3 mil kilómetros cuadrados de superficie? Si bien no existen estudios científicos profundos, Buffard apunta a una mezcla de fragilidad ambiental con acción humana negativa para el entorno. “El agua se usó para riego y para actividades mineras y fue contaminado con desechos de esas industrias, lo que ayudó a calentar las aguas. En determinado momento la evaporación superó a las lluvias y lo que parecía imposible sucedió”.
La editorial
Listo Calisto, la editorial que editó el libro, es el resultado del trabajo y la voluntad de Strappa, Rossi y Maroni. Las tres se conocieron en un curso y allí comenzaron a darle forma al proyecto, que (contando el del lago Poopó) ya lleva 12 libros publicados en sus cuatro años de vida.
“Cuando escuchamos la historia de Émilien sobre su viaje y vimos las imágenes pensamos que todo ese relato tenía que convertirse en un libro” contaron las tres, para agregar que el alma de Listo Calisto es hacer “algo más que un libro” sumándole a los proyectos arte, herramientas lúdicas o bien opciones interactivas. “Buscamos prolongar la experiencia de la lectura yendo un poco más allá” explicaron. “Fundamentalmente tenemos la editorial porque nos gusta hacer libros” dijeron en coro. Toda una declaración de principios.